Descripción
Puzzle de 1000 piezas, basado en un dibujo de Maurits Cornelis Escher. El puzzle mide 68×48 cm, con piezas de tamaño estándar. La particularidad del dibujo con muy poca variedad de color convierte este puzzle en un reto con una dificultad extra. Un reto atractivo para cualquier puzzlero al que le gusten las cosas singulares. Ideal para aquellos que se arriesgan con retos atrevidos.
M. C. Escher es el genio de las figuras imposibles, los mundos imaginarios y las ilusiones ópticas. Sus dibujos muestran espacios paradójicos, representados de forma tridimensional, que implican un desafío a todo lo tradicional. Como muestra el título de algunas de sus obras, el mundo es relativo y eso es lo que nos muestra en sus ilustraciones. Un mundo inquietante que no se rige por las normas de nuestra normalidad. Un mundo desafiante que abarca mucho más de lo que puede percibir el ojo humano.
Sus obras muestran una peculiar relación entre las figuras y el fondo. Una relación que reta la lógica convencional y consigue que los huecos de los patrones sean, no huecos, sino nuevas figuras. Solo hay que saber mirar. La obra de Escher es un juego visual constante, un poco abstracta, un poco conceptual, un poco fantástica pero siempre muy geométrica.
Amante de las simetrías, el infinito, la falta de límites, los reflejos, las transformaciones… con dibujos casi siempre en blanco y negro. El espacio, que estudia y cobra gran importancia en alguno de sus dibujos, a veces es suficiente para justificar una obra en sí mismo. Los cuadros de Escher tienen algo hipnótico que los convierte en obras únicas de la historia del arte.
¡Disfruta de su arte montando una de sus obras!
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