Descripción
La fiesta asegurada con este marchoso pollito. ¿Qué hay mejor que dar un instrumento a un niño? ¡Darle varios en la misma estructura!
Los niños, desde el nacimiento, aprecian los sonidos casi como único medio para conocer el mundo. A través de ellos alcanzan la calma absoluta, la seguridad al escuchar sonidos conocidos y la curiosidad al escuchar sonidos aún extraños. Es por ello, que aporrear objetos para descubrir cómo suenan, es una de las actividades favoritas de los más pequeños desde que son capaces a dirigir sus manos. Este precioso pollito de madera, incluye un pequeño xilófono de metal, un rascador de madera y un tambor con los decibelios ajustados. Y lo más importante, un palito con bola para golpear sin hacerse daño.
Los tres instrumentos están pensados para que los oiga el niño, pero no causen demasiado estruendo. Los niños tienen un oído fabuloso, por ello no necesitan el exceso de ruido que muchas veces encontramos en otros instrumentos para los más pequeños.
Además, el pollito tiene un asa, perfecto para transportarlo a cualquier parte a modo maletín. No pesa mucho y su tamaño es ideal para niños a partir de un año de edad.
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