Descripción
Este juego, como algunos otros a lo largo del mundo, debe su creación a la aprobación de una ley. En los años 30 las autoridades rumanas declararon los juegos de cartas ilegales. El creador, muy aficionado, no paró hasta encontrar la solución: sustituir las cartas por fichas.
La originalidad del Rummy radica en que las fichas que están sobre la mesa pasan a ser de todos los jugadores, con lo que estos pueden hacer cambios en las combinaciones ya ligadas. Pueden reordenar las fichas como quieran con una sola condición: que en el proceso no quede ninguna combinación de menos de 3 fichas.
Un excelente juego que desarrolla el cálculo mental y obliga a usar la cabeza.
Compuesto por 106 fichas con números y colores, el objetivo de cada jugador es deshacerse de las piezas que tiene en su atril al comienzo de la partida (14) ligando tríos y escaleras. Cuando un jugador consigue agrupar 3 números iguales o una serie consecutiva de, al menos, 3 fichas, puede bajar esa jugada a la mesa. Si no puede bajar nada a la mesa, entonces debe robar de la reserva.
Esta edición, totalmente artesanal, está hecha completamente en madera, y es un regalo a la vista y al tacto para los amantes de este juego.
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